Con la llegada del mundo moderno, la humanidad parece haberse vuelto más intolerante; bajo este precepto, se considera de alto valor el impulsar el respeto hacia las ideas, preferencias, formas de pensamiento o comportamientos de las demás personas, aunque no coincidan con las propias. Ante la cualidad de quien puede resistir, aceptar y respetar opiniones ajenas, RedEscolar rinde tributo a la virtud que ha quedado sentada desde 1995 en el Día Internacional de la Tolerancia, que busca fortalecer la compresión mutua entre las culturas y los pueblos.

Hoy por hoy nos preguntamos, ¿por qué un día para la Tolerancia?

Si bien la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), en su Carta funcional precisa la importancia y trascendencia de la cooperación internacional en la solución de problemas de carácter económico, social, cultural o humanitario y en el desarrollo; por lo que ha estimulado el respeto a los derechos humanos y las libertades fundamentales de todos, sin hacer distinción de raza, sexo, idioma o religión enunciado en la Declaración Universal de Derechos Humanos. En consecuencia, Naciones Unidas estableció el Día Internacional para la Tolerancia, alarmada por la intensificación de los actos de intolerancia, violencia, terrorismo, racismo, exclusión, xenofobia, discriminación, nacionalismo agresivo; así como de los actos de intimidación contra personas que ejercen su derecho a la libre opinión y expresión.

Con motivo de la 28ª. reunión de la Conferencia General de la UNESCO, celebrada del 25 de octubre al 16 de noviembre, los Estados miembro adoptaron la Declaración de los principios sobre la Tolerancia, que afirma que desde este enfoque se reconocen los derechos humanos universales y la diversidad de los pueblos.

En el artículo 1º, la Declaración de los Principios sobre la Tolerancia, ésta se define de la siguiente manera:

Tolerancia consiste en el respeto, la aceptación y el aprecio de la rica diversidad de las culturas de nuestro mundo, de nuestras formas de expresión y medios de ser humanos. La fomentan el conocimiento, la actitud de apertura, la comunicación y la libertad de pensamiento, de conciencia y de religión. La tolerancia consiste en la armonía en la diferencia. No sólo es un deber moral, sino además una exigencia política y jurídica. La tolerancia, la virtud que hace posible la paz, contribuye a sustituir la cultura de guerra por la cultura de paz.