«Las cuatro condiciones para la felicidad: el amor de una mujer, la vida al aire libre, la ausencia de toda ambición y la creación de una belleza nueva.»
- Edgar Allan Poe.
Considerado como uno de los principales autores de la novela gótica e inventor del relato detectivesco, Edgar Allan Poe realizó aportes a la ciencia ficción y gracias a los cuentos de terror es ampliamente reconocido como poeta y escritor estadounidense, quien nació en Boston, E.U. (19 de enero de 1809) y falleciera en Baltimore, el 7 de octubre de 1849. En su aniversario luctuoso el ILCE rinde homenaje por su gran aporte al género literario universal.
"En el amor desinteresado de un animal, en el sacrificio de sí mismo, hay algo que llega directamente al corazón del que con frecuencia ha tenido ocasión de comprobar la amistad mezquina y la frágil fidelidad del Hombre natural.” Edgar Allan Poe.
A los dos años de edad, Edgar perdió a sus padres; por esta causa, un hombre de negocios de Richmond, John Allan, se hizo cargo del pequeño. Se dice que la relación con su padre adoptivo no fue la mejor, lo que se vería reflejado en su obra. Cursó los primeros años de escuela en Reino Unido y posteriormente en Estados Unidos; fue expulsado de la Universidad de Virginia en 1827, tiempo en el que se mudó a Boston donde escribió su primer libro: Tamerlán y otros poemas.
Edgar Allan Poe se dedicó a escribir cuentos de terror, detectivescos, de ciencia ficción y satíricos; influenciado por los ingleses góticos como: Walpole, Radcliffe o Maturin. Inspirado también por poetas como Lord Byron, Shelley, Keats, entre otros.
Los cuentos de terror representaron su faceta más destacada en los que Poe, según estudiosos como Benjamín F. Fisher, pretendía dejar “helado al lector”, así como lograr una compatibilidad entre lo gótico y lo psicológico. Algunos autores destacan la parte onírica de sus cuentos macabros, lo que atribuyen a los difíciles acontecimientos que vivió desde su infancia.
Se le considera también, el creador del relato detectivesco; sus aportaciones para esta categoría se reflejan directamente en Sherlock Holmes, ya que Conan Doyle inspiró su personaje en Auguste Dupin, personaje de Poe.
Por su parte, la ciencia ficción, emergente en ese momento, también tuvo lugar en su obra; los inventos como el globo aerostático se reflejan en algunas obras suyas.
La obra de Allan Poe contiene también una faceta de teórico de la literatura. En obras como Fundamento del verso (1843) y La filosofía de la composición (1846), argumentó ideas novedosas que buscaban cimentar la escritura reflexiva y mejorar las técnicas.
En total, la obra del estadounidense está constituida por más de 400 piezas; entre el género de terror, suspenso, policiacas, teoría literaria, ciencia ficción y poemas.
Audiolibro 'El corazón delator', cuento de Edgar Allan Poe
«En la crítica seré valiente, severo y absolutamente justo con amigos y enemigos. Nada cambiará este propósito.»
- Edgar Allan Poe.
Nuestro escritor es considerado uno de los cuentistas más importantes de toda la historia; describió principalmente ambientes góticos, siniestros y no faltaron las apariciones sobrenaturales. Allan Poe buscó crearles una atmósfera llena de duda y misterio; mientras que la descripción de personajes, momentos y lugares fue excepcional.
La caída de la casa Usher es una obra muy importante; en ella, el narrador comparte los últimos días de su amigo Rodrigo Usher, luego de que una grave enfermedad provocara la muerte de su hermana, quien es enterrada en una cripta subterránea; sin embargo, la hermana reaparece, dando un giro total a la obra y causando una serie de emociones en los lectores.
Tres de sus cuentos icónicos, sentaron las bases de la novela policiaca: Los crímenes de la calle Morgue, El misterio de Marie Rogêt y La carta robada. Protagonizados por Auguste Dupin, quien dejara los precedentes de los relatos detectivescos; y permitieran la caracterización del detective más famoso de la literatura, Sherlock Holmes de C. Doyle.
Por su parte, El gato negro (1843) fue un cuento publicado en el Saturday Evening Post; considerado, hasta la fecha, como una de las obras de terror de mayor impacto psicológico en la historia de la literatura. El asesinato de un gato marca el inicio de una serie de acontecimientos cuyo desenlace es inesperado.
El corazón delator (1843) se publicó en el periódico “El Pionero”. Su narrador obsesionado con un anciano, decide asesinarlo. El asesinato y las investigaciones se van dando de una forma que parece no incriminarlo; sin embargo, el latir de un corazón, lo delata.
Además, destacan otras obras como: La verdad sobre el caso del señor Valdemar, Un descenso al Maelström, El pozo y el péndulo, Manuscrito encontrado en una botella y El hombre de la multitud.
La influencia del autor estadounidense trascendió los años; múltiples autores han sido inspirados y cautivados por Allan Poe. Según el español Félix Martín, sus repercusiones impactaron en el simbolismo francés, el decadentismo inglés, la ficción detectivesca, teorías formalistas y estructuralistas contemporáneas.
En palabras de Sir Arthur Conan Doyle, quien diera vida a Sherlock Holmes, «Cada una de estas obras constituye una raíz de la que ha brotado toda una literatura. [...] ¿Dónde estaba la literatura policíaca antes de que Poe le insuflara el aliento de vida?». Mientras que la Asociación de Escritores de Misterio de Estados Unidos, nombró a su galardón más preciado los “Edgard´s”, en honor a Poe.
En la ciencia ficción, sus influencias llegan a autores de la talla de H.P. Lovecraft, Ray Bradbury y Julio Verne. Éste último escribiría una secuela de la novela de Poe, La narración de Arthur Gordon Pym.
Traspasó las fronteras de los idiomas y fueron diversos literatos quienes expresaron algún comentario sobre su vida y obra; por ejemplo: el destacado autor inglés, Lovecraft, opinó «La fama de Poe ha sido objeto de las más curiosas vicisitudes y ahora está de moda entre la avanzada intelligentsia como para minimizar su importancia e influencia como escritor. Claramente le sería difícil a un crítico imparcial negar el enorme valor de su obra y la potencia penetrante de su pensamiento como creador de visiones artísticas».
Charles Baudelaire, reconocido poeta francés, lo comparaba con autores como Diderot, Laclos, Goethe, Honoré de Balzac, entre otros. «¡Lamentable tragedia la de la vida de Edgar Poe! Su muerte, ¡desenlace terrible, cuyo horror incrementa la trivialidad! Todos los documentos leídos me han llevado al conocimiento de que los Estados Unidos no fueron para Poe sino una vasta prisión que recorría con la agitación febril de un ser creado para respirar en un mundo más aromático».
Los latinoamericanos Julio Cortázar, Rubén Darío y Jorge Luis Borges resaltaron la obra de Allan Poe; Borges incluso le dedicó un soneto.
Rubén Darío lo nombró Príncipe de los poetas malditos; añadió que “La influencia de Poe en el arte universal ha sido suficientemente honda y transcendente para que su nombre y su obra sean continuamente recordados”. Desde su muerte acá, no hay año casi en que, ya en el libro o en la revista, no se ocupen del excelso poeta americano, críticos, ensayistas y poetas. La obra de John Henry Ingram iluminó la vida del hombre; nada puede aumentar la gloria del soñador maravilloso».
De igual manera, Cortázar apuntó, con respecto al escritor estadounidense, que «de la totalidad de elementos que integran su obra, sea poesía, cuentos, la noción de anormalidad se destaca con violencia. A veces es un idealismo angélico, una visión asexual de mujeres radiantes y benéficas; a veces esas mismas mujeres incitan al entierro en vida o a la profanación de una tumba, y el halo angélico se cambia por un aura de misterio, de enfermedad fatal, de revelación inexpresable; a veces hay un festín de caníbales en un barco a la deriva, un globo que atraviesa el Atlántico en cinco días, o la llegada a la Luna después de asombrosas experiencias.»
El 7 de octubre de 1849 Edgar Allan Poe murió, en el Washington College Hospital; la causa sigue siendo un misterio, debido a que los documentos oficiales se perdieron. Los periódicos de la época hablaron de una inflamación cerebral, que se atribuía a alguna adicción.
Según Cortázar y otros autores, en sus últimos momentos, Poe invocaba a “Reynolds”; podría ser el explorador de su novela La narración de Arthur Gordon Pym, y al morir exclamó: “¡Qué Dios ayude a mi pobre alma!”.
Sin duda alguna, Edgar Allan Poe es uno de los escritores más reconocidos de toda la historia; sus cuentos son parte de la literatura imperdible para cualquier lector. Leer su vasta obra nos hará comprender la influencia que ha ejercido sobre otros autores y cómo han evolucionado a lo largo de su vida los géneros que él desarrolló.
“A la muerte se le toma de frente con valor y después se le invita una copa".
Edgar Allan Poe.
Después de revisar la información sobre nuestro personaje central, los invitamos a realizar las siguientes actividades:
